Cuando amenazan nuestras creencias, nos volvemos irracionales
Es genial que los hechos estén de nuestra parte. Cuando el fundamentalista religioso encuentra un hallazgo arqueológico que concuerda con lo que dicen las Escrituras, su fe se consolida. De la misma forma, cuando el ateo descubre evidencias que contradicen la existencia de Dios, se siente aún más fuerte y seguro. Sin embargo, la lógica nos dice que cuando las evidencias van en contra de nuestras creencias, estas deberían vacilar o, cuanto menos, debilitarse. Aún así, como la mente humana es particularmente compleja, no siempre funciona siguiendo la lógica.
Leer más en: Rincón de la psicología
Comentarios
Publicar un comentario