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Duelo por Dorothy: un grupo de chimpancés observan
en silencio la retirada del cadáver de una hembra muy querida
por ellos |
Esta mona que muere como un hombre. Este entierro en carretilla, con la mandíbula sujeta. Este animal que se va, esta madre antepasada. Y ese humanísimo duelo de primates tras la verja. La estampa estremece por su verdad salvaje. Dorothy es la difunta, una primate de Camerún con 40 años de derrotas. Pertenece a esa cofradía prehumana por muy poco. Es más: ellos son los humanos anteriores a la corrupción, a la tortura, al trapicheo, a la codicia. Los que no especulan con su deseo, ni con su amor, ni con su hambre, ni con su daño. Los que no hunden el mundo para salvarse a sí mismos. (Leer más en:
El Mundo: Crónica).
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